E foi chegando o Samaín

 Este ano o Samaín veu un pouquiño apoucado, asustado pola cantidade de máscaras que hai polo colexio pero así e pois nós fixemos un esforzo e colaboramos un pouco....

E temos tamén algún conto que fomos escribindo.....

La gran casa encantada

 

 Hace  tanto tiempo que casi no se puede imaginar. Si, cuando existían fantasmas, brujas, esqueletos, vampiros, momias,  zombies…

En la casa del Bosque Oscuro vivía el fantasma Asustar,  la bruja Hechizo  y el vampiro Sangriento, y, ¡como no!, la araña Scary. Esa noche, la del 31 de octubre, estaban los cuatro en la cocina charlando y comiendo unos ojos de rana con un poco de agua del Pantano de las Ratas mientras veían las “Noticias del esqueleto  Bones Hard, las noticias interesantes del Bosque Oscuro” cuando escucharon …                       

-¡Vamos, Ana, corre! -dijo Jonh- si no, vendrán los lobos otra vez!

-Ya voy, Jonh ¡no quiero que vuelvan los lobos!-respondió Ana.

Jonh y Ana acabaron en el Bosque Oscuro. Estaban pasando la noche de Halloween con sus tíos, sus abuelos, sus padres y su  primo. Cuando salieron de casa un momento para colgar un murciélago de papel, un buho pasó por delante suya y éstos lo siguieron. El búho se dirigió al bosque oscuro, y ellos, sin darse cuenta, le siguieron.

Luego, el búho se escapó en un momento de despiste de los niños y se marchó. Ana y Jonh intentaron regresar a su casa  pero no pudieron porque se habían perdido.

A continuación llegó una manada de lobos y casi los comen, si no fuera porque se subieron a un gran árbol y esperaron hasta que se fueron.

El caso es que ahora estaban corriendo por todo el bosque para buscar su casa…..

-¡Ana! ¿No has visto allí, a lo lejos una luz? - dijo Jonh

-¡Si! Tienes razón, allí se distingue una tenue luz entre los árboles.-respondió ella.

Era verdad, se trataba de la luz de la cocina de Hechizo, Asustar, Sangriento y Scary. Así que Ana y Jonh decidieron dirigirse hacia allí.

...

Cuando escucharon un ruido en la puerta, Sangriento fue a ver que había y, se encontró con Ana y Jonh.

Ana y Jonh se quedaron totalmente paralizados y, Sangriento, también se quedó bastante asombrado; pero como tenía hambre, les dijo:

-Pasad, niños, pasad!, yo no os haré nada, pasad a tomar algo.-dijo.

-¿Seguro? Usted tiene una pinta muy rara… Su cara… es muy blanca… y sus dientes… son muy… muy… muy... grandes… -dijo Jonh

-Jonh, va a ser mejor que no entremos. Ese señor tiene una pinta muy rara.-susurró Ana.

-Tenemos que ir a algún sitio, Ana. No nos podemos quedar aquí.- dijo Jonh

-Si, pero… -respondió en bajito Ana.

-¿Venís o no venís?- dijo Sangriento impaciente por comer algo.

-Si, iremos.- dijo firme Jonh.

         Sangriento se dirigió a la cocina y los niños le siguieron. Al llegar Sangriento les contó a los demás habitantes de la casa lo que se había encontrado al abrir la puerta del gran caserón, y les presentó a los niños. Todos les miraron y se relamieron.

Al cabo de un rato, los niños estaban dentro de una cazuela y Scary decía:

-Riquísimo, ¡esto está riquísimo!-exclamó.

-¡No hay nada mejor que un buen guiso de niños!-dijo Hechizo.

-Oye, Sangriento, muchas gracias por este manjar.- agradeció Asustar.

Aurora Rodríguez

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